La historia es sencilla pero llena de grandes momentos y personajes, tan bien desarrollados que algunos que al principio me parecían aburridos o sin mucho encanto (como el capitán Wentworth), después resultaron completamente distintos. El humor de Austen es genial para la época y muchos de los diálogos sobre "cuestiones de hombres y mujeres" son brillantes, aunque otros son como para pasar rápido la página y recordar de nuevo el año en que el libro fue escrito. La famosa carta del final sí es para derretirte y sí terminó gustándome mucho Frederick (mil veces mejor que Darcy), aunque otros personajes me gustaron más, como su hermana (la esposa del almirante Croft), la mamá de Henrietta y Louisa, Charles Musgrove y el capitán Harville. También hay otros a los que odié como Mary y Sir Walter. De la protagonista, Anne, no sé bien qué pensar. Me gustó la rectitud con la que hacía todo, el que siempre estuviera dispuesta a ayudar y que fuera tan "buena" en general, pero me desesperaba que fuera tan fácil de manipular y ciertos comentarios que hacía (los comentarios más sexistas en la novela los hace ella!).

En fin, me gustó mucho, y espero leer otra cosa de Austen pronto.