La verdad, entré con muy pocas expectativas a la lectura porque había escuchado mixed-reviews sobre el libro. Y aunque sí que me ha gustado leerlo y se me ha hecho más ameno de lo esperado —he amado todo el proceso de crecimiento de Kya, sus amoríos y sus reflexiones—, no creo que sea un libro al que regrese. Me ha sido muy difícil continuar con la lectura, me he atascado en varios puntos y el final, aunque me lo medio esperaba, ha sido bastante underwhelming y me ha dejado bastante indiferente. El meter ese caso de asesinato entre medias ha estado chulo y he comprendido bien su resolución y tal, pero ha llegado un momento en el que se me ha hecho algo aburrido y estaba ya deseando acabar. Un libro que ha pasado por mis estanterías sin pena ni gloria.