Como siempre yo me adentré en este libro sin saber nada de la historia, sin haber siquiera leído la sinopsis, que es como me gusta a mí abordar las historias, y creo que es un gran acierto no llevar expectativas con este libro, porque puedes hacerte una idea equivocada sobre dónde está el enfoque del mismo. He leído gente diciendo por ejemplo que esperaba una historia de amor convencional... Y no se trata de eso.

Simplemente quiero decir lo mucho que he disfrutado la historia y la escritura de la autora y lo muchísimo que recomiendo este libro.

Creo que lo más destacable para mí es lo mucho que me gustaría parecerme a Addie algunas veces.
Después de haberla conocido, no me extraña que la gente se sintiera atraída por ella, que los artistas se inspiraran en una chica a la que ni siquiera recordaban, es lógico, al fin y al cabo es precisamente el tipo de persona que (irónicamente) deja huella, que cautiva.
Y ni siquiera es eso lo que más le envidio, es la curiosidad por el mundo, por lo desconocido, la pasión por experimentar y vivir, la fortaleza para enfrentarse a la inmensidad de la oscuridad y aún así divisar las estrellas.
Envidio que vagara 300 años y aún así REALMENTE VIVIERA.

Adeline, no creo que nadie pudiera olvidarte.